Goooooooooooollllll

No me gustan las matemáticas, pero cuando de la Selección Peruana se trata, soy capaz de creer que le podemos meter 18 goles a Brasil y que así clasificaremos. La selección no me avergüenza, me maltrata.

Soy de las que se ponía el despertador para poder ver los partidos de la selección, de las que iba a clases somnolienta y casi siempre triste por la amanecida-goleada.

Soy de las que dice ¡Nunca más creeré en la selección! No los voy a seguir, no los veré más porque no se lo merecen, pero que gritan: ¡GOOOOOOOOOOL! rompiéndose la garganta como anoche.

Soy una peruana hincha de su selección, porque a pesar de haber querido no soy capaz de dejar de ver cada partido, aún a sabiendas que puede que perdamos y hasta que nos goleen.

Soy una peruana que en una típica conversación sobre fútbol los defiende, que dice que les falto poco, que en realidad hay buenos jugadores sólo que no se han comunicado bien o que el arbitro era chileno, soy de esas que cuando algún amigo de otro país dice y ¿Perú como va? responde: Va, de a poquitos pero va.

Soy una hincha que sueña con escuchar su himno en un mundial, que sabe que no haremos un buen papel, que puede que nos metan mas de 6 pero se conforma con la entrega, con el corazón, con que suden la camiseta.

Soy una de tantas que iba al estadio a alentarlos, que pagaba su entrada, se ponía su camiseta, se pintaba la cara y gritaba como desesperada con nuestros ya famosos ¡CASI GOL! si 3 casi-gol hicieran un gol, Brasil nos temería.

Soy, mejor dicho, hubiera sido de las que ayer fueron al estadio, sabiendo que hace mucho que estamos eliminados pero que va a ver a su selección a pesar de las críticas, de las que aún creen en los milagros, de las que siguen comprando camisetas, cintas, globos y gorros de su selección.

Soy de las que quisieron estar ahí y no pudieron, de las que lo vieron por la tv o por el Internet. Soy de las que grito:¡Vamos Chorri! ¡Muchachos pónganle huevos!

Soy una hincha como tantas que al ver entrar a los jugadores a la cancha piensa para si misma, SI SE PUEDE.

Soy de las que ayer no sólo esperaba que no nos golearan sino golear, de las que grito: ¡ARRIBA PERÚ!